En esta ocasión, siguiendo la serie de nuestro blog en el que hablamos de las lesiones producidas en deportes comúnmente practicados, vamos a hablar sobre el running. Este deporte tiene múltiples beneficios para nuestra salud ya que ayuda a perder peso, incrementa la resistencia física, tonifica los músculos, mejora la capacidad pulmonar y disminuye el riesgo de sufrir trastornos cardíacos.

Es uno de los deportes más practicados dado a la relativa facilidad a la hora de hacerlo, se puede practicar a cualquier edad y no requiere unas cualidades deportivas especiales. Además de esto se suma, la flexibilidad horaria ya que no se necesita un horario estricto para practicarlo y el poco material que exige tener.

También por estas razones, se da una tasa alta de lesiones ya que se suele practicar sin tener una buena técnica previa y sin cuidar el equipamiento que se usa para ello.

Entre las lesiones que se producen normalmente practicando este deporte, se encuentran: Periostitis tibial, fascitis plantar, esguince de tobillo, sobrecarga muscular, tendinopatías (tanto del tendón rotuliano como del tendón de Aquiles), síndrome de la cintilla iliotibial (también llamado síndrome del corredor y que produce dolor en la cara externa de la rodilla) e incluso fracturas por estrés de los huesos del pie.

A continuación, os dejamos las claves para evitarlas:

  1. Calentar bien: Como en cualquier deporte, la preparación al ejercicio es muy importante. Realizar ejercicios de carrera suave, de movilidad articular y estiramientos dinámicos es muy útil para preparar al cuerpo para el esfuerzo que vamos a realizar posteriormente.
  1. Buena técnica: Como en todos los deportes, es imprescindible tener una técnica adecuada para evitar lesiones, para ello es adecuado recurrir a profesionales y/o correr en grupo. Así, podremos corregir malos gestos y evitar movimientos lesivos a la vez de ser más eficientes en la carrera.
  1. Ojo con el terreno en el que corremos: Es más recomendable correr por hierba o tierra que hacerlo por asfalto. En caso de correr en asfalto, al ser un terreno duro debemos elegir un calzado con buena amortiguación.
  1. Hidratación: Hay que hidratarse antes, durante y después de correr debido a la cantidad de sudoración que se produce.
  1. Si es la primera vez que corres, hazlo de manera progresiva. Es bastante útil si nunca has practicado este deporte, empezar intercalando tramos andando, a trote y carrera.
  1. Cuidado con la pisada y elegir bien las zapatillas: Para evitar lesiones derivadas de una mala pisada, realizar un estudio previo, es la clave. En base del estudio, hay veces que se recomienda el uso de plantillas o adaptaciones para corregir una mala pisada y así evitar problemas.
  1. Según la condición física que se tenga, en las ocasiones en las que reunamos factores de riesgo como tener por encima de los 40 años, tener sobrepeso y llevar mucho tiempo en inactividad, es aconsejable hacerse un chequeo cardiovascular antes de empezar a practicar este deporte.

Estos son nuestros consejos para evitar lesiones practicando running, en caso de duda o de sufrir cualquier lesión derivada de éste y otros deportes, ya sabéis: ¡Consultad con el fisio!